Pero ayer finalizó el recuento definitivo de los votos en el Teatro Argentino de La Plata, y la justicia electoral comunicó de manera informal a los partidos el resultado: ganó Cristina Kirchner por poco más de 20 mil votos, aproximadamente 0,4% del total de los sufragios válidos, número que se actualizará en el transcurso de 48 horas cuando se proceda a la apertura de las urnas que fueron observadas (son poco más de 50 y corresponden a las mesas donde los votos fueron objetados por algún fiscal) y se analicen los votos recurridos, impugnados y los del comando electoral. Por eso la oficialización será recién el miércoles.
«Se comunicó de manera informal que ganamos por 30 mil votos, más o menos», reconocieron voceros de la ex mandataria, que realizará mañana un acto en La Plata para aprovechar la simbología de una victoria. El dato, además, fue confirmado desde Cambiemos. En los despachos de la Casa Rosada estimaban este resultado desde hace días: «Hay una diferencia de aproximadamente 20 mil votos, nos parece razonable; era lo que esperábamos», graficó un funcionario nacional ante la consulta de este medio.
Los votos impugnados son aquellos de los que se cuestionó la identidad del votante y los de comando son los votos de los integrantes de las fuerzas de seguridad que estuvieron asignados a alguna tarea en la elección y por ese motivo no pudieron sufragar en su mesa y lo hicieron mediante un sistema especial, y solo para las categorías nacionales –en provincia senador y diputado– y no para los cargos locales.
Según el escrutinio provisorio, que se detuvo cuando se llevaba escrutado más del 95 por ciento de las mesas, en la elección para senadores nacionales, Cambiemos cosechaba el 34,19 por ciento de los votos seguido por Unidad Ciudadana con 34,11 por ciento de los sufragios. Una diferencia de solo 6.915 votos. En cuanto a los diputados, el oficialismo se alzaba con el 34,58 por ciento contra 32,37 por ciento que obtuvo la fuerza que conduce la ex presidenta.
El resultado en Buenos Aires marca el punto de inicio para la campaña a las elecciones generales de octubre con una base más sólida. Así, confiados, en el kirchnerismo estiman que el piso que representaron las PASO «más los votos de algunos peronistas que no nos votaron permitirá que entre Jorge Taiana y no Gladys González al Senado».
En cambio, en el oficialismo apuestan a profundizar la polarización. «Salimos casi empatados. Y antes de la elección decían que perdíamos por 10 puntos. A eso hay que sumarle el resultado sorprendente en el país. Quizá alguno de los votos peronistas vengan para nosotros; hay que ver la campaña, la economía que viene ayudando y el empujón de las PASO».