Un adolescente pidió ser adoptado por su madrina y su pareja. La madre padece problemas mentales, pero estuvo de acuerdo. Para la Justicia, hay «un vínculo afectivo comprobable».
La jueza Valeria Vittori aceptó el pedido del joven de ser adoptado de manera directa por su madrina y su pareja porque encontró que había “un vínculo afectivo comprobable”.
La madre del menor padece esquizofrenia y en el hospital donde se hacía atender conoció a una enfermera que eligió como madrina del niño. A los 9 años, el muchacho ya había planteado vivir con su madrina y la pareja de ella, quienes se encargaban sus cuidados, como los traslados a la escuela y a la casa paterna, pedido que fue avalado por su mamá.
Durante el proceso de adopción, la progenitora declaró estar de acuerdo con el trámite ya que continúa manteniendo contacto con su hijo los fines de semana.
A pesar de que el Código Civil y Comercial prohíbe la guarda directa, en este caso la magistrada dio lugar al pedido dejando constancia de que el afecto es un aspecto fundamental en el derecho de familia.
Entre los motivos agregó que prima el interés superior del chico y su derecho de ser oído, ya que fue él quien manifestó sus deseos de ser adoptado.
Informe de Verónica Maslup.