La Asociación Trabajadores del Estado, seccional Río Tercero brindó una conferencia de prensa en su local, partidario. Bajo el lema «No! al achicamiento de FMRT, los trabajadores muestran su preocupación por un posible vaciamiento de la fábrica militar.
La voces de los trabajadores estuvieron a cargo de Cristian Colman, y Damián Albornoz. Según los referentes de ATE falta una modernización de la planta. Aducen falta de elementos de seguridad, guantes, chalecos, y un plan de inversión en seguridad y denuncian que hacen trabajos que no le corresponden y son ellos -los trabajadores- que salen a vender los productos.
40% MENOS ES EL PRESUPUESTO CON EL RESPECTO AL AÑO ANTERIOR DE FÁBRICA MILITAR
Existe 60 empleados menos, que con respecto al año anterior. Ya que los que se jubilan no se remplazan.
La convocatoria estaba organizada semanas atrás. Automáticamente, el intendente Alberto Martino, salió a bancar a su colega partidario Oscar Aguad, actual ministro de Defensa de la Nación.
QUE DIJO AGUAD
En declaraciones a el Diario de Río Tercero, el intendente dice que habló con Aguad , y que tuvo una charla muy positiva y esperanzadora, y que la sección metal mecánica se va a reactivar». En ese sentido el titular de ATE, Cristian Colman fustigó las declaraciones del jefe comunal:
«En el caso Atanor según Martino, los 70 millones de dólares en la inversión eran para reactivación. Que las familias se queden tranquilos que no va a ver ningún despidos. Luego, despidieron 24 empleados. Se ve que el intendente tiene buenas fuentes.No lo escuché yo decir en conferencia de prensa que le mintieron (en referencia a los despidos de la firma Atanor)».
Espero que ahora, no no hayan mentido. ¿Ustedes no le creen al intendente?, preguntó una periodista. El sindicalista contestó: «no sé si le creemos o no, pero la realidad dice otra cosa»
¿CONTRATADOS HASTA FIN DE AÑO?
La postura del gremio es intransigente. 464 son los contratos que finalizan a fin de año. Si tenemos que pasar Navidad y Fin de año adentro de la fábrica lo haremos, aduce Albornoz. El estado tiene la convicción de precarizar el trabajo, y éste es el mejor ejemplo. Ellos no quieren que los empleados tengan una relación de dependencia, además esto es parte de la flexibilización que se viene.