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Por Lic. Jorge Ariel Wolyniec. Psicólogo MP 2112 / Municipalidad de Río Tercero. Secretaria de Salud de Río Tercero. Dirección de Políticas y Programas Sociales Integrales. Punto Mujer
RÍO TERCERO / VIOLENCIA DE GÉNERO / Espacio para el tratamiento de Varones en Situación de Violencia de Genero / El Lic. Jorge Ariel Wolyniec aborda el otro costado de violencia de género, no solo la mujer recibe ayuda desde el Punto Mujer Río Tercero, además, el hombre recibe un tratamiento y/o apoyo psicológico. FOTO TAPA: ALEGÓRICA.
El Punto Mujer de Río Tercero, es un espacio público recientemente creado, para trabajar por una ciudad libre de violencia de género.
Entendemos por violencia de género la violencia hacia las mujeres por el sólo hecho de serlo. Y esto no se circunscribe solamente en la violencia física, sino que esta es el resultado de una “violencia simbólica” instaurada en nuestra sociedad, que pasa desapercibida para nosotros, porque estamos acostumbrados y no la podemos reconocer fácilmente, expresa el profesional.
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Dentro de las acciones que realiza el Punto Mujer de Río Tercero, tenemos un espacio para el tratamiento de varones en situación de violencia de género. Atendemos a hombres que han sido denunciados y que se les obliga a realizar tratamiento psicológico.
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Para el psicólogo Wolyniec: “Parte del proceso apunta a identificar la violencia, no sólo la física sino todo tipo de violencia que se manifiesta en el trato hacia las mujeres, la forma de vinculación, el lugar de la mujer como pareja, los mandatos sociales sobre la masculinidad, el lugar del hombre en la familia”.
AL HOMBRE HAY QUE EDUCARLO
Posteriormente se busca el aprendizaje de nuevas conductas, crear otro forma de vincularse con las mujeres, responsabilizar al hombre por sus conductas dejando de lado la justificación basada en la conducta de la mujer. Estas nuevas conductas las llamamos nuevas Masculinidades, las cuales se construyen desde una mirada igualitaria del hombre y la mujer.
La violencia de género atraviesa todas las capas sociales, no es exclusiva de un sector y se manifiesta en toda nuestra organización social, desde las oportunidades de inserción social y laboral, los mandatos sociales sobre el lugar de la mujer, los estereotipos de hombre y mujer y la naturalización de un trato desigual. En este entorno es donde se enmarca la violencia hacia la mujer, como una construcción social y no una patología que padece una persona.
Las intervenciones son individuales con cada hombre, pero está planificado la formación de grupos psicoeducativos, donde se trabajen nuevas masculinidades y se obtenga apoyo grupal para la construcción de nuevos vínculos con la pareja y las demás mujeres. Esta modalidad la vamos a implementar a partir de la autorización para podernos reunir grupalmente a raíz de las medidas preventivas por el Covid-19, cuenta Wolyniec.
Finalmente, el profesional expresó: “actualmente estamos atendiendo en el Centro de Salud de Bº Escuela y en el Centro de Salud de Bº Cerino, donde los varones que han sido denunciados pueden concurrir a solicitar turnos para recibir atención”.
