En 2020, la Legislatura aprobó de forma unánime la normativa 10707, que instituye en todo el territorio de la provincia el 21 agosto de cada año como Día Provincial de las futbolistas.
De acuerdo al proyecto, que a nivel nacional surgió como una iniciativa de “Las Pioneras” (como se las conoció a las jugadoras que en 1971 representaron a Argentina en el Mundial de México de 1971), el Poder Ejecutivo Provincial debe desarrollar actividades públicas y campañas de concientización y sensibilización con perspectiva de género para la promoción y visibilización del fútbol femenino “procurando articular las acciones con los diferentes sectores y organizaciones sociales involucrados, sin perjuicio de las demás actividades que los organismos oficiales permanentes desarrollen durante el resto del año”.
Tras la aprobación de esta ley, en el mundo del fútbol femenino cordobés ocurrieron hechos clave. Por ejemplo, en General Paz Juniors se creó, en 2020, la subcomisión de Género. Una de sus integrantes, Paula Valdivieso, conoce el paño como pocas porque es, además, jugadora. Esta defensora del “Albo” explicó cómo incidió la ley en su universo.
“Con el Día de la Futbolista, Córdoba fue pionera. Ponerle un día a algo que antes no existía es importantísimo, porque lo que no mencionábamos no existía. Establecer una fecha marca que estamos acá, pisando las mismas canchas que los varones, que el fútbol femenino existe y que merecemos ese reconocimiento porque trabajamos hace mucho tiempo para que esto se conozca”, remarcó la zaguera central.
Además, Valdivieso resaltó el rol del fútbol en la vida de las mujeres: “Esto sirvió también para que todos sepan que nosotras podemos amar de la misma manera, con la misma pasión, el fútbol. Y, sobre todo, porque para nosotras el fútbol es un espacio de contención dentro de todas las violencias que vivimos por ser mujeres. El fútbol a nosotras nos salva de muchas cosas, y por eso me parece importante el acompañamiento de los clubes y que desde el Estado se reconozca como un día de visibilización”.
La experiencia “gloriosa”
Karin Federman es profesora de Educación Física y es una referente de Club Instituto en la lucha por el reconocimiento a la mujer, en especial en el ámbito del fútbol. Federman subrayó que con esta legislación “nos están empezando a mirar”.
“Lo que la ley expresa es que hay que promocionar, visibilizar y concientizar sobre la figura de la futbolista y el fútbol femenino en la provincia. En ese sentido, considero que es importante porque es el puntapié inicial para decir: ‘Nos están empezando a mirar’”, destacó.
También añadió que la ley contribuye a cambiar el paradigma arraigado en el deporte, donde el fútbol se asociaba exclusivamente con hombres: “Sabemos que todas las leyes pueden incidir a modificar comportamientos. Y eso implica modificar un paradigma que tiene que ver con el deporte hegemónico en nuestro país, que es el fútbol, que es mirado y referenciado únicamente con un varón. Detrás de las leyes siempre hay una necesidad y después se construye un derecho. En Instituto, por ejemplo, había desigualdades con la vestimenta: las jugadoras jugaban con ropa anterior, de otra marca, y ahora se les entrega la misma indumentaria que tiene el masculino”.
La rebeldía “pirata”. Antes de ser profesora de educación física, de trabajar en Belgrano y de formar su propia escuela de fútbol mixta para adultos, Constanza Guerra debió patear el tablero. Porque en su casa no la dejaban jugar a la pelota y entonces, cuando cumplió 18 años y se fue a vivir sola, decidió ir detrás de sus sueños y se fue a probar a “la B”.
Pasó la prueba, alternó sus días de futbolista con los de estudiante universitaria, hasta que se decidió por la formación. Y desde esa fecha, camina junto a una disciplina que la apasiona y que conoce en profundidad. Con esa autoridad, celebró la sanción de una ley que transformó el universo del fútbol femenino cordobés.
“La sanción del Día de la Futbolista implica movimientos y acciones que colaboran en pos del deporte y no solamente con el fútbol, sino que genera un impacto y una valoración de la mujer dentro de diferentes ámbitos. Hay espacios como las dirigencias, la política, la economía, donde también hace mucha falta. Y el fútbol funciona como un puntapié y una onda expansiva que abarca un montón de cosas”, subrayó.
Por último, Guerra apuntó a un próximo paso, la profesionalización del fútbol, y a la prudencia que conlleva materializar un avance semejante.
“Es una evolución y un progreso constante, es paulatino. Quizás uno quisiera que fuera un poquito más rápido, pero sabemos que cada cosa lleva su tiempo. Y el progreso y la adaptación de toda una cultura y de una sociedad, porque nosotros queremos que haya más mujeres en la cancha, porque hace falta, pero también hay que dar el tiempo necesario para que las mujeres se animen a formarse, se formen y empiecen a trabajar en estos ámbitos”, cerró.
“Matador” ascendido
En un contexto de aires renovados para Córdoba, cabe recordar que en 2022 el femenino de Talleres ascendió a la Primera B del fútbol de AFA. Así, la “T” dejó atrás un 2021 en el que el club había perdido la afiliación a la Liga Cordobesa de Fútbol y casi quedan marginadas de participar en AFA el año pasado.
De esta manera, el equipo dirigido por Miqueas Russo, Marcelo Juárez y Rodrigo Nuccetelli escaló a la segunda división del fútbol argentino.
Queda claro que la ley es un hito que marca el progreso en Córdoba. A través de la visibilización, el reconocimiento y el compromiso de la comunidad deportiva y gubernamental, las futbolistas de la provincia están un paso más cerca de alcanzar la igualdad y equidad que se merecen.