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DEPORTE / FÚTBOL / El seleccionado dirigido por Diego Placente igualó 3 a 3 y perdió en la definición desde los doce pasos; ahora jugará por el tercer puesto.
La selección Sub 17 cayó en las semifinales del Mundial de Indonesia en los penales, frente a Alemania, luego de haber igualado 3 a 3 en el tiempo regular. El conjunto dirigido por Diego Placente jugará el viernes próximo por el tercer puesto, frente al perdedor del encuentro que disputarán este martes Francia y Mali.
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Argentina se perdió el gol en la primera jugada del partido, cuando un error de salida de Alemania fue aprovechado por Echeverri. Sin embargo, la definición del volante de River fue tapada por el arquero Heide. Sería una señal de lo que vendría. Heide reemplazó en este partido al arquero titular, lesionado, y terminaría siendo la figura excluyente.
Alemania era peligroso de contraataque, y a través de esa vía pegó primero. Brunner ingresó al área y definió al primer palo con cierta complicidad del arquero Florentín. Pero el 0-1 no desanimó a Argentina, que dominó el desarrollo y llevó peligro permanente.
Agustín Ruberto apareció por dos en el primer tiempo, la segunda vez cuando el partido ya se iba al descanso, para dar vuelta el encuentro y ponerle justicia. Argentina era mejor que su rival y lo justificaba en el resultado.
El segundo tiempo arrancó igual. Argentina se perdió algunos goles y Heide empezó a erigirse en figura. Pero llegó lo inesperado. Un pase malo del arquero Florentín se la dejó servida a Brunner, que definió al ángulo para poner el empate. El equipo nacional pareció sentir el impacto. Placente hizo cambios, pero no funcionaron y Alemania, con atacantes peligrosísimos, dio otra estocada. Nuevo error argentino: Villalba rechazó hacia el medio y Moerstedt puso a los europeos 3-2 arriba.
Cuando parecían resignados, en la última, Ruberto le dio vida a Argentina. El empate 3-3 llevó el partido a los penales. Placente hizo ingresar a Franco Villalba, arquero de Vélez, antes del final del partido. Especialista en penales, pudo atajar uno. Sin embargo, Echeverri y Mastantuono fallaron y convirtieron en héroe a Heide.