POR JUSTO DAGORRET. La ciudad de Río Tercero, tiene una reseña de contingencia ambiental de un prontuario demasiado negativo. Escape de fosgeno, de ácido clorhídrico, voladura de material bélico, son unos de los lamentables ejemplos, donde el riesgo hacia la población es inminente. Para ello el plan Apell es una de las alternativas más confiables, pero otra vez se empaña el trabajo por la mezquindad de sectores afectados.
¿CUÁNDO PASÓ Y CUÁNDO NOS ENTERAMOS?. Desde Defensa Civil y del Concejo Deliberante solicitaron los respectivos informes para poder esclarecer que sucedió el 18 de setiembre dentro de la fábrica Petroquímica. Hoy viernes 5 de octubre, llegaron los informes respectivos al Juzgado de Faltas Municipal, donde deberán establecer las medidas correctivas o las multas respectivas.
En 2007 ocurrió un episodio cuando dos operarios murieron en Petroquímica Río Tercero por inhalar gas fosgeno.
PLAN APELL. En los últimos años, el plan denominado APELL, el cual lo conforman empresas químicas y convencionales, Bomberos Voluntarios, Defensa Civil, gremios, COSP, Cruz Roja, medios de comunicación y varias instituciones de la ciudad, han logrado políticas en conjunto.
La finalidad del grupo son la transparencia en los actos, planes de evacuación, notificación inmediata de los incidentes y sobre todo la protección de los ciudadanos riotercerenses.
La falta de comunicación es una falla reiterada del Plan Apell. Y por necesaria convivencia se debe corregir este aspecto de raíz.
DERRAME DE ÁCIDO. El incidente ocurrió el 18 de setiembre pasado, y según versiones de la empresa, el ocultamiento del derrame de 20 tn de ácido clorhídrico fue una de las causantes de los despidos de dos operarios. En tanto, desde el gremio de los químicos, enterados el día posterior también mostraron una actitud de no divulgar el incidente.
DEFENSA CIVIL: El viernes 28 de setiembre tras la comunicación de los despidos de los dos operarios, por el supuesto derrramamiento de ácido, Defensa Civil se entera del incidente, luego, tras varias inspecciones a la empresa difundieron a la población que no había riesgo alguno y que la producción química era segura.
Consultado a Diego Carinci, principal responsable de Defensa Civil Municipal sobre el tema explica que la ordenanza establece que luego de producirse un incidente y/o contingencia ambiental, es deber de las empresas involucradas dar aviso cinco minutos después de un evento, sea o no riesgo para el personal o para la comunidad.
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