Durante más de 12 años de Kichnerismo, el populismo en la Argentina -en su expresión máxima- tuvo como destino planes sociales en vez de trabajo genuino. Eso caló muy fuertemente en la cultura de los más necesitados. Claro, los planes de sociales fueron destinados a ese segmento de la población y ahora tratar de cambiar su estilo cultural de trabajo no es tarea sencilla.
La municipalidad de la ciudad tenía previsto dictar en barrio Magnasco un Taller de electricidad. Al no haber gente interesado por el momento se tuvo que suspender.
Con el panorama económico nacional que afectan a todos los argentinos, conseguir un trabajo en la ciudad es complicado, más aún si desde el comercio, negocio o empresa se solicitan mano de obra calificado. Pero, hay que seguir apostando a la educación, capacitación y sobre todo atender a los más necesitados.