EL DÍA QUE RÍO TERCERO HIZO LLORAR A JESÚS

POR DARÍO COMBA / RÍO TERCERO DE AYER Y DE HOY / NOVIEMBRE DEL 2011,  Pasaba yo justo por ahí como tantas veces lo hacemos todos….y no lo pude creer … la primera sede de la Iglesia de Lourdes de la ciudad ya agonizaba, malherida, sentenciada por la mano del hombre y su voraz progreso.

 

PUBLICIDAD

 

Esa que fue el sueño, desvelo y logro del cura Bernard hace casi un siglo, gestionando, valga la redundancia, “con Dios y María Santísima” para acercar la iglesia a la gente de la zona sur de aquel incipiente Río Tercero (que mayormente se concentraba en barrio Norte) y que para ir a las misas debía cruzar las vías para ir a “las monjas”.

 

 

Volé a mi casa con un nudo en la garganta, mezcla de bronca, impotencia, desconcierto tal vez, agarré la máquina de foto y allá fui… si bien, ya no funcionaba como iglesia, había sido Escuela de Artes por un tiempo, por otros años también los talleres del ITT, alguna que otra vez, hasta he visto estibadas bolsas con semillas como si fuera un depósito, pero estaba en pie. Ahí bautizaron a mi madre, un frío agosto de 1940.

…que se yo….sentí DESPROTECCIÓN…. AUSENCIA TOTAL DE AUTORIDAD, DE LA IGLESIA Y DEL GOBIERNO LOCAL, esa es la palabra, de que los funcionarios de turno y de todos los que siempre se llenaron la boca con bla bla, etc., etc. , demostraron por una vez más, cuando deben jugarse por una se borran, se pasan por allá abajo toda esa historia y no hayan hecho NADA DE NADA por rescatarla.

 

 

 Y si lo hicieron, fallaron en su praxis, en ni siquiera avisarle a la gente del pueblo lo que estaba a punto de ocurrir, todo, nuevamente, se cocinó en un hermético silencio. Y si bien, no soy lo que se dice un ultra devoto religioso ni asiduo concurrente a misas, siento que ese día nos traicionamos una vez más a nosotros mismos, a nuestro patrimonio y a nuestra historia, y sobre todo, al flaco de la cruz, a ese mismo al que 16 noviembres, le suplicábamos por nuestras vidas cuando la ciudad estallaba.

Hoy le tirábamos abajo una de las que había sido su casa, y TODOS (con una indiferencia bastante común de estos tiempos y en franco aumento) miramos para otro lado. Imperdonable, por donde se lo mire….