Nadie duda del trabajo comunitario de unas de las instituciones intermedias más reconocidas. La sensación de ver al presidente de BV peregrinar por la Municipalidad y el ente cooperativo, deja la sensación de no contar con una previsión en caso de un exabrupto financiero económico como el que ocurrió: el cese del aporte económico que hacíamos todos los riotercerenses dentro de la boleta de energía eléctrica.
El dato, es que dicho aporte mensual unos 400 mil pesos por mes, fue legalmente impuesto bajo ordenanza municipal, y derogada por la Provincia con apoyo del Ersep.
Antes de entrar en la discusión si Bomberos tuvo o no previsión económica, hay que dejar en claro algo…los ciudadanos no estamos obligados a aportar para que la institución funcione. Para eso, pagamos impuestos nacionales, provinciales y municipales.
Una ciudad se arma y se diagrama, con cuestiones básicas, como por ejemplo un centro cívico, una municipalidad, una estación de policía, una iglesia, un destacamento de bomberos y así sucesivamente. Pero, la ciudad de Río Tercero, necesita de un cuartel de Bomberos, ya que no sólo por cuestiones ligadas al cordón químico, sino además porque dispone de grandes edificios, más de 25.000 viviendas, por citar algunas cuestiones de seguridad.
Bomberos ha crecido y se actualizado de forma contante desde las fatídicas explosiones del ´95. Tras el rearmado del cuerpo, Bomberos ha tenido y ha sido reconocido por ser uno de los cuarteles más modernos y equipados en recursos humanos y operativos. Camiones, lanchas, ambulancias, sistemas de comunicación, escaleras, son algunas de las herramientas que cualquier estación de bomberos le gustaría disponer.
El Gobierno Municipal le propone a BV un pago mensual de 200 mil pesos
Pero, el ajuste que implementó el gobierno de Macri, hace una restructuración en los impuestos, por consecuencia, Bomberos deberá armar el ingenio y procurar que los gobiernos hagan posible su funcionamiento.
Sólo basta navegar por los sitios de internet, el cuantioso dinero que el Estado Nacional y Provincial (Impuesto al Fuego) destina a cuarteles de Bomberos como los de Río Tercero, además de recibir múltiples beneficios como impositivos, etc.
En definitiva, el problema es político y Bomberos deberá adecuarse a los recursos y manejarse con algo de previsibilidad. Hasta ahora, la política no pudo resolver el desajuste, ni la institución tuvo el recaudo económico-financieros.