La cuadrilla del Gobierno porteño llevó adelante los trabajos de asfalto, sin remover los vehículos presentes.
El asfaltado fue hecho en calles adoquinadas en distintos puntos del barrio de Saavedra, pero lo insólito fue lo que ocurrió en la calle García del Río entre Goyeneche y Holmberg. Ante la presencia de los autos estacionados, en lugar de removerlos, se realizó el asfalto alrededor de los mismos, por lo que quedaron huecos sobre la calzada.
Esto ocurrió ya que algunos frentistas se negaban a mover sus vehículos porque quería que se conserve el adoquinado en el sector. Es por esto, que pese al reclamo de los vecinos, la obra se llevó a cabo y dejaron sin asfaltar los metros cuadrados donde estaban estacionados los autos.