Algunos cosas habrán cambiado para siempre, por ejemplo la palabra seguridad se remplazará por bioseguridad. Abogados y estudiosos preparan cambios en la letra chica de los contratos de alquileres, seguros de vida, por citar ejemplos.
Este año 2020, más que nunca habremos aprendido que la pandemia del coronavirus no es la excepción. En esto más de cincuenta días de pandemia, el miedo, la solidaridad, la espera de la noticia, una vacuna, los hisopados, el encierro, las restricciones son temas que debemos dejar de lado para dar lugar a lo que denomino la post pandemia.
Debemos, ser creativos más que nunca, no hablar de miedos sino de protocolos. Principalmente los comunicadores debemos enfocarnos en nuevos escenarios, de pensar en noticias creativas.
Pasó con la tinta, con el papel, con la locomotora, con la peste bubónica, con las máquinas de escribir, debemos abrir la mente para ingresar al mundo de las vacunas para enfermedades más complejas no sólo para niños, además para adultos.
Las cosas simples de la vida como los saludos con un beso en la mejilla serán cosa del pasado, para entrar al mundo del “codazo”. La paciencia tendrá que venir acompañada de proyectos solidarios y fundamentados con estadísticas.
Consultado, a políticos locales, provinciales y nacionales la coincidencia es absoluta; todos admiten que esta pandemia sirvió para replantearse y reafirman que la salud es prioridad, sin ella no habrá proyectos individuales ni grupales. Evidencia, el gran valor de la salud pública, algo que nunca más habrá que descuidarla.
Por último, en este domingo de otoño pandémico, reflexionó: “he vivido y vivo la pandemia en primera persona, con todos los actores sociales, solo puedo manifestar que el daño que ocasionó el virus ya está hecho, lamentablemente a los fallecidos, a los asintomáticos, a los positivos, a los sanos, a los médicos, a los policías, a los enfermeros, a los de seguridad municipal, a los periodistas, a las maestras, a los padres, a los niños, a los abuelos, a todos. Pero solo una cosa me permite seguir pensando y escribiendo y es estár vivo. Cosa fundamental para pensar en un mundo mejor”.