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DEPORTE / FUTBOL / SUPERCLÁSICO / Nunca en los 108 años de historia oficial del Superclásico, el Xeneize se presentó con otra vestimenta que no sea la tradicional. Las excepciones, dos amistosos de verano de 2010, que no terminaron bien para el equipo por entonces dirigido por Alfio Basile. Cosa de chamanes…
El Superclásico del próximo domingo entre River y Boca pasará a la historia. Y por razones que van más allá de lo estrictamente futbolístico. Será el primero de carácter oficial en más de un siglo que Boca afrontará sin su tradicional casaca azul y oro.
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El propio club solicitó jugar con la misma camiseta amarilla que empleó el domingo en La Plata para ganarle 1 a 0 a Estudiantes. Y la Liga Profesional se lo concedió sin problemas ni demoras.
Como en el fútbol argentino, el pensamiento mágico es muy fuerte y parece creerse cada vez más en lo esotérico y cada vez menos en algo tan sencillo como jugar mejor que el circunstancial adversario, el Consejo de Fútbol que encabeza Juan Román Riquelme suscribió la idea inesperada. Algunos se la atribuyen al propio Consejo, otros al cuerpo técnico que lidera Sebastián Battaglia y otros más, a algunos chamanes o manosantas a los que suele consultarse antes de los partidos importantes. Sea como fuere, se concluyó que si algo salió bien no se lo debe cambiar. Y como Boca ganó en La Plata, qué mejor que volver a usar aquella casaca amarilla que se había estrenado con éxito.
Más allá del triunfo del domingo pasado en La Plata, las camisetas amarillas no están asociadas a los más grandes éxitos xeneizes. Salvo la finalísima de la Copa Libertadores de 1977 que Boca le ganó 5 a 4 por penales a Cruzeiro en el estadio Centenario de Montevideo con una casaca blanca porque con la amarilla había perdido 1 a 0 en Belo Horizonte, todos sus demás títulos nacionales e internacionales los obtuvo con su camiseta de toda la vida.
En la antesala de un nuevo Superclásico y en un homenaje a la magia, se decidió cambiar. Habrá que ver lo que le deparará el destino después de semejante desafío a la historia.