El Cheque Inmortal: conoce al actor de Titanic que, 28 años después, sigue ganando dinero por decir solo cinco palabras.

ACTUALIDAD/ EN EL MUNDO/ ESPECTÁCULOS/ La curiosa y persistente historia de Reece Thompson es un ejemplo fascinante de cómo funciona el sistema de regalías (o pagos residuales) en Hollywood, incluso para los papeles más pequeños, siempre y cuando incluyan una línea de diálogo.
Reece Thompson tenía solo 5 años cuando fue elegido para la épica película de 1997, Titanic, de James Cameron. En ese momento, había iniciado una breve carrera como modelo infantil.
Su madre le dio a elegir entre un comercial de una estación de servicio o participar en Titanic. Afortunadamente, eligió el rodaje. Inicialmente, su papel solo era de extra sin diálogo, pero a último momento, Cameron le asignó una breve frase.
Thompson interpreta a un niño irlandés de tercera clase que viaja con su madre y su hermana. Su única frase, y la que lo mantiene cobrando regalías, es la desgarradora pregunta a su madre en los momentos previos al hundimiento: «¿Qué estamos haciendo, mamá?» (en inglés: «What are we doing, Mum?»). La escena, donde su madre los arropa para esperar un final inevitable, es una de las más emotivas y trágicas del film.
Por su trabajo en el set, Thompson recibió un pago único que, según se informa, ascendió a unos $25,000 dólares en ese momento. Su familia depositó ese dinero en una cuenta bancaria, destinándolo a su educación y otros gastos.
Lo que transformó su breve aparición en una fuente de ingresos a largo plazo es el concepto de pagos residuales (royalties). En la industria del cine, los actores reciben una pequeña parte de los ingresos que la película genera por proyecciones, ventas de DVD, streaming y licencias, especialmente si tienen una línea de diálogo (los extras sin diálogo rara vez reciben estos pagos).
28 años después del estreno, Thompson sigue recibiendo cheques de forma regular, aunque la cantidad ha disminuido con el tiempo. Actualmente, recibe entre $100 y $300 dólares trimestrales o anuales.
Thompson, ya adulto y trabajando en la actualidad en marketing digital, comentó que los cheques son una sorpresa agradable más que una fuente principal de ingresos. En entrevistas, ha bromeado: «Es curioso, porque esto ya no está presente en mi mente. No es que piense: ‘Oh, ¿cuándo voy a recibir un nuevo cheque del ‘Titanic’?’ Pero, cuando sucede, es como decir: ‘Oh, genial, 100 dólares extra’.»
Su caso subraya el éxito monumental e inagotable de Titanic. Al ser una de las películas más taquilleras de la historia, sus constantes reestrenos y su presencia permanente en plataformas de streaming garantizan que los pagos residuales sigan fluyendo a todos los miembros del elenco acreditado, incluso a aquel niño que solo pronunció cinco palabras.